Estoy en tu búsqueda...

Ya tengo edad suficiente, pero creo que nunca me sentiré preparada del todo. Por eso me he demorado tanto en tomar esta decisión de verdad, desde el fondo de mi voluntad.

Eres lo que busco, lo que buscamos... y, considerando que aunque no suene bien, por mi parte no eres tan deseado, no serás un capricho, vendrás por las tuyas a llenar nuestras vidas o, mejor dicho, a servirte de nuestras vidas para construir la tuya.